En Brasil, el crossover recibió una serie limitada de 500 unidades con piezas exteriores negras, tapizado exclusivo y el motor 1.6 de 115 CV con caja automática.
Arribado a Argentina en marzo de este año, el Peugeot 2008 es la propuesta crossover de la marca en el segmento B. Ahora, el modelo fabricado en Brasil, que es el que llega al mercado local, recibió en ese país la serie limitada Crossway, disponible a través de 500 unidades.
La clave de la nueva versión es la personalización tanto exterior como en el habitáculo, manteniendo el equipamiento y la mecánica de la versión Griffe (la más equipada en Brasil), a partir de la que fue desarrollada.
La carrocería conocida del modelo está pintada exclusivamente con el color blanco perlado y se combina con una serie de piezas de color negro: llantas de aleación de 16 pulgadas, protectores plásticos en guardabarros y calcos en la zona baja de puertas y paragolpes. Asimismo, posee espejos cromados y el logotipo de la serie sobre el portón trasero.
Las novedades se trasladan al interior, donde cuenta con el característico i-Cockpit (tablero elevado y volante pequeño) y luce tapizado de cuero con el logotipo de la serie bordado en los respaldos de las butacas delanteras.
La mecánica está conformada por el motor naftero 1.6/16v con 115 caballos a nafta y 122 con etanol, la caja automática con cuatro marchas y levas en el volante y la tracción 4×2, es decir delantera (ningún 2008 tiene tracción 4×4).
En términos de equipamiento, el 2008 Crossway posee ítems conocidos en la variante Feline en Argentina: frenos con ABS, airbags frontales, laterales y de cortina (6), climatizador automático de dos zonas, techo panorámico con cortina eléctrica, central multimedia con pantalla táctil de 7 pulgadas y navegador satelital, doble regulación de volante, computadora de a bordo, espejos y levantavidrios eléctricos y volante multifunción, entre otros.
Así es la gama del Peugeot 2008 en Argentina.