El crossover con líneas de coupé se destaca por su diseño llamativo y su motorización que le permite ofrecer interesantes prestaciones. Cómo anda y cuánto cuesta.


Texto y fotos de Gastón Vanini.

El Fiat Fastback llegó al país el año pasado como el modelo de pasajeros tope de gama de la marca italiana de Stellantis. Una apuesta interesante con plataforma y otras características similares a las del Pulse (prueba), además de compartir piezas con el Argo y el Cronos.

Este crossover o SUV (como lo llama la marca) es producido en Brasil y comercializado en Argentina con las versiones Turbo 270 AT6 y Abarth Turbo 270 AT6 (más deportiva). Probamos la primera y te contamos nuestras impresiones. A continuación, qué ofrece y cómo anda.

Diseño que no pasa desapercibido

El Fastback se diferencia de sus hermanos de gama por su mayor tamaño y sus líneas de coupé, el gran atractivo del modelo. Combina el logrado diseño frontal -similar al del Pulse- con una voluminosa zona trasera que puede dividir opiniones; en ella se destaca la caída del techo, los parantes y la luneta, además del generoso voladizo. Subjetivamente, y tras el acostumbramiento correspondiente, me parece un diseño acertado que logra llamar la atención.

La configuración exterior también es acertada porque incluye una carrocería bitono con techo negro brillante, color que se extiende a los espejos y otras piezas como la parrilla frontal. También hay que destacar los apliques de plástico oscuro en los guardabarros y las llantas de aleación de 18 pulgadas, enormes y vistosas, acompañadas por los neumáticos con medida 215/45, un perfil demasiado bajo para las calles y rutas argentinas.

El interior del Fastback

En su habitáculo, el Fastback tiene muchas características compartidas con el Pulse, incluyendo un panel de a bordo con líneas que gustan, plásticos rígidos y buena calidad general para el segmento. Asimismo, se destaca el tablero de instrumentos totalmente digital (7 pulgadas), con el cuentavueltas central y otras muchas funciones cambiando el modo de visualización. Y la gran pantalla multimedia central de 10,1 pulgadas con buen funcionamiento y una ubicación que queda bastante cerca del conductor.

El agradable volante multifunción regula en altura y profundidad y, junto al asiento con ajuste de altura, brindan un posición de manejo acertada. A eso se suman los prácticos comandos físicos de la consola central, el freno de estacionamiento eléctrico, el apoyabrazos central para compartir con el acompañante y el agradable tapizado de cuero oscuro y con costuras a la vista.

En las plazas traseras hay un buen espacio para las piernas y algo más justo para la cabeza (por la caída del techo), mientras que el asiento -demasiado inclinado- es cómodo, incluso en la plaza central, donde además hay puertos USB para cargar dispositivos y salidas de aire del climatizador (poco común en el segmento).

Por otro lado, el Fastback brinda una insonorización adecuada y un baúl con una capacidad enorme: 600 litros que se pueden ampliar hasta los 1.087 l con el asiento rebatido (por tercios). Debajo del piso está la rueda de auxilio temporal (llanta de acero de 16 pulgadas y neumático 125/80) que limita la velocidad a sólo 80 km/h; es poco conveniente para Argentina.

Equipamiento y seguridad

El equipamiento de confort está bien para el segmento, ya que incluye climatizador automático, plegado automático de espejos, acceso sin llave, botón de encendido, volante con cuero, computadora de a bordo, control de velocidad crucero, conectividad inalámbrica con Android Auto y Apple CarPlay, navegador satelital y cargador inalámbrico de teléfono. Más detalles, en la ficha de abajo. 

La seguridad incluye frenos con ABS y EBD (distribución electrónica), control de estabilidad, control de tracción avanzado, airbags frontales y laterales para cabeza y tórax (debe la protección en las plazas traseras), asistente de arranque en pendiente y control de presión de neumáticos. Se destacan los sistemas de frenado autónomo de emergencia, mantenimiento de carril activo y luces altas automáticas.

La estructura del Fastback aún no fue probada por Latin NCAP, que sí chocó el Pulse (el modelo más cercano): obtuvo una calificación de dos estrellas (la nota máxima son cinco estrellas) con una estructura estable (ver).

 

Mecánica y comportamiento

El motor es el naftero GSE 1.3 turbo con cuatro cilindros, inyección directa de combustible y cadena de distribución ya presente en otros modelos de Stellantis como los Fiat Pulse Abarth y Toro y los SUV de Jeep. Produce 175 caballos de potencia a 5.750 rpm y 270 Nm de torque cuando funciona a 1.850 rpm. Está acompañado por la caja automática con convertidor de par, seis velocidades y cambios bastante veloces (también con las levas del volante). La tracción es delantera. 

El conjunto de motor y caja brinda un muy buen funcionamiento que permite circular tranquilamente y, por otro lado, ofrece mucho empuje cuando se lo solicita con el acelerador. 

El Fastback es un auto muy ágil, algo que se valora especialmente cuando salimos a la ruta, porque es rápido para realizar sobrepasos. Además, tiene un modo de manejo Sport que exprime todo el potencial del conjunto y hasta cambia el color del tablero (pasa a rojo). Acelera de 0 a 100 km/h en 8 segundos (medición a velocidad real), lo que confirma la mencionada agilidad. 

Por su parte, los consumos de combustible mostraron un gasto ahorrativo de sólo 5,6 l/100 km cuando circula a 100 km/h constantes (105 km/h en el tablero y 2.100 rpm); con el tanque de 47 litros, logra una autonomía de 839 kilómetros. El consumo se eleva hasta unos 8,1 l/100 km a 130 km/h (580 km de alcance) y a unos 10,8 litros en la ciudad (435 km), números lógicos para las características del crossover. 

La suspensiones son convencionales (con eje de torsión trasero) y generan un comportamiento agradable que, en la ciudad, permite superar con suavidad lomos y cunetas, además de brindar un buen despeje del suelo. Lo peor del conjunto es el bajo perfil de los neumáticos, que transmite las irregularidades de superficies como los empedrados. En los veloz se destaca el buen comportamiento dinámico, incluyendo la efectividad con la que resuelve su paso por las curvas, brindando una respuesta placentera y seguridad al conductor.

La dirección eléctrica ofrece una asistencia acertada que la hace liviana en la ciudad, donde además se destaca el buen diámetro de giro para los espacios reducidos. Y es bastante directa -y más firme- en lo veloz. Otro ítem a favor para el Fastback.

Por su parte, los frenos tienen discos delanteros, tambores traseros y un pedal con tacto agradable; lo detienen de 100 km/h a cero en algo más de 40 metros, un número razonable para el segmento.

Precio, garantía y rivales

El Fiat Fastback Turbo 270 AT6 tiene un precio sugerido -para enero- de 34.879.000 pesos, un indicador más de su posicionamiento como modelo de pasajeros tope de gama de la marca. El rival más cercano para realizar una comparación es el Volkswagen Nivus, con mucha menos potencia y un precio de $38.244.000. Por su parte, el Fastback Abarth (más deportivo) cuesta $38.288.000 y la garantía cubre 3 años o 100.000 kilómetros.


Fiat Fastback – ficha técnica y equipamiento


Fiat Fastback – Galería de imágenes


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