Tras el reciente estreno de la renovación, la camioneta sumó una versión que se diferencia por su aspecto y comportamiento más deportivo.
La Ford Maverick Lobo es la inédita versión deportiva -orientada al asfalto- de la pick up compacta, que ayer estrenó diversos cambios para el diseño y el interior (ver). Presentada en Estados Unidos, la nueva alternativa del modelo producido en México se destaca por sus diferencias en el aspecto (exterior e interior) y la mecánica. ¿Llegará a la Argentina?
Cómo es exterior y el interior de la Maverick Lobo
La estética de esta nueva Maverick incluye un sector frontal exclusivo con cambios para la parrilla (con barras verticales) y el paragolpes. En los laterales se destacan las llantas con diseño aerodinámico, 19 pulgadas y un color negro también presente en el techo. A eso se suma el paragolpes trasero con el color de la carrocería.
Ford también anunció que el techo de la Lobo es unos 2 centímetros más bajo y que el despeje -respecto del suelo- fue reducido aproximadamente 1,3 cm en la parte delantera y unos 2,8 cm en el sector trasero.
El interior de esta Maverick está inspirado en el arte callejero, incluyendo tapizados de cuero con costuras decorativas de color amarillo y azul (también presente en otros sectores) y el nombre de la versión en los respaldos.
Los cambios técnicos de la Maverick Lobo
Una de las diferencias de la nueva versión es la suspensión -independiente en las cuatro ruedas- con amortiguadores calibrados especialmente para la Lobo. A eso se suma el nuevo ajuste para la dirección eléctrica (promete una conducción como un auto de alto rendimiento) y los frenos con mayor tamaño y con las pinzas delanteras (con doble pistón) del Focus ST europeo.
La Maverick Lobo utiliza el conocido motor naftero EcoBoost 2.0 turbo que, en Argentina, genera 253 caballos de potencia y 380 Nm. Lo que sí cambia es la caja: es una automática con siete velocidades y levas en el volante (las otras versiones tiene la automática de ocho marchas) unida a la tracción integral con un diferencial trasero de doble embrague que permite el reparto del torque entre las ruedas.
Adicionalmente, esta versión estrena el modo de conducción Lobo, que permite mejorar el rendimiento en las curvas, el agarre y la estabilidad minimizando el subviraje.
