Basada en la NP300 Frontier, posee frontal propio y motor 2.3 biturbo con 160 ó 190 caballos. Se hará en Córdoba junto a la Nissan y la pick up de Mercedes-Benz.
Renault presentó mundialmente en Colombia la Alaskan de producción, la primera pick up mediana con capacidad de una tonelada de la marca francesa, que aprovechó la Alianza Renault-Nissan y la experiencia de esta última en el segmento.
Así nació la nueva chata, que fue desarrollada a partir de la nueva generación de la NP300 Frontier. Y de ahí el parecido de la silueta de la carrocería doble cabina, que sin embargo se diferencia por un sector frontal propio que luce moderno gracias a los rasgos característicos de Renault.
Entre las claves de la atractiva zona delantera se encuentran la generosa parrilla que envuelve al Rombo y se conecta con las ópticas, rectangulares y con proyectores y luces diurnas de LED con forma de “C”.
El sector posterior de la carrocería, por su parte, luce el nuevo portón de caja cuyas molduras le brindan un estilo agradable. Se combina con las flamantes ópticas, también diferentes a las de Nissan.
En el interior la única novedad –al menos a la vista- es el renovado volante con el Rombo, que anticipó el equipamiento: controles de estabilidad y tracción, ABS con EBD y BA, asistente de arranque en pendiente, control de descenso, pantalla táctil de 7 pulgadas, climatizador automático bizona, navegador satelital, acceso manos libres, arranque mediante botón, asientos delanteros con calefacción y sistema de visión 360° con cuatro cámaras exteriores.
Las opciones de motor anunciadas son tres. En primer lugar está el diésel 2.3 dCi biturbo con cuatro cilindros, el mismo que utilizan tanto la NP300 Frontier como la Master. La configuración para la Alaskan le permite entregar 160 ó 190 caballos (como la Nissan), con la que además comparte las cajas manual de seis marchas y automática con siete cambios, así como la tracción 4×4 con sistema electrónico, reductora y bloqueo de diferencial posterior. También se anunció la tracción simple (en el eje trasero) y un motor naftero 2.5 con 160 caballos, aunque su presencia dependerá del mercado.
Respecto de la japonesa que se fabrica en México (desde donde llega a Argentina), la Alaskan también mantiene el chasis de largueros y la suspensión trasera, cuyo esquema innovador consta de un eje rígido con sistema Multilink compuesto por cinco brazos acompañados por resortes. El conjunto permite brindar una capacidad de carga de más de una tonelada y de remolque de 3,5 toneladas.
Global y con producción local
La nueva Alaskan fue concebida como un producto global. Así lo indican las tres plantas confirmadas para su producción: Cuernavaca (México), Barcelona (España) y Argentina, en la fábrica Santa Isabel del Rombo en Córdoba a partir del año 2018. Para que eso suceda se concretará el proyecto que incluirá una inversión de 600 millones de dólares y la fabricación compartida con la NP300 Frontier y una pick up de Mercedes-Benz –también basada en la Nissan- en la misma planta.
