El exitoso modelo producido en Argentina está disponible con doce versiones. Nos subimos a la SRV con caja automática y tracción 4×4.

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Texto y fotos: Gastón Vanini (@GastonVanini).

PRESENTACION

La Toyota Hilux es un modelo que a lo largo de los años se ha convertido en un fenómeno en el país. Es sinónimo de pick up o camioneta, y desde hace más de una década es líder en ventas en su segmento. Es más, en los meses de abril y mayo fue el modelo más patentado en todas las categorías.

La buena fama la construyó gracias a su confiabilidad mecánica y a los servicios de postventa de la marca, una combinación exitosa que parece haberse potenciado con la llegada de la octava generación, lanzada en el país a fines del año pasado.

La Hilux es una herramienta de trabajo que no defrauda. Es elegida por las empresas que realizan los trabajos más duros y una aliada en el campo argentino, donde es común cruzar un ejemplar de la chata, que desde el año 1997 es fabricada en la planta bonaerense de Zárate. Allí, la marca invirtió 800 millones de dólares para convertirse en base exportadora en América Latina, algo que ya está poniendo en práctica.

Desde mediados de los noventa, la Hilux ha evolucionado mucho, siempre conservando la robustez y la confiabilidad que la carateriza, pero también sumando más confort y equipamiento. El primer gran cambio se llevó a cabo en el año 2005, cuando debutó la séptima generación, la cual se convirtió en la referencia del segmento.

La última generación posee avances en cuanto a diseño, equipamiento y mecánica. Con una gama conformada por doce versiones, Auto en Acción tomó contacto con la SRV 2.8 TDI con caja automática y tracción 4×4, la tercera más cara de la familia. La conocemos en detalle, rubro por rubro.

DISEÑO

Como siempre, la estética de un vehículo es un asunto opinable y la opinión es subjetiva. Uno de los sellos característicos de la chata es la nueva parrilla prominente, una «nariz» con opiniones encontradas, ya que para muchos la hace imponente y robusta, mientras que para otros es demasiado «trompuda». Pero todos coinciden en que le brinda carácter y personalidad.

Otra evolución se dio en la zona lateral, sector que le dio la bienvenida a una ventana trasera cuyo diseño, con una zona superior más generosa, le aporta un estilo dinámico. Además, es 4,5 centímetros más baja (1,815 m) que la Hilux anterior.

Sin embargo, la pick up ostenta un crecimiento en el largo total, ahora de 5,33 metros (7 centímetros más) y en el ancho, que se incrementó 2 cm para llegar a los 1,85 m. La distancia entre ejes es la misma, con 3,08 m.

Si nos referimos a la estética, la variante SRV posee una presentación acertada compuesta por manijas y paragolpes delanteros pintados con el mismo color de la carrocería, espejos y paragolpes cromados, estribos laterales y vistosas llantas de aleación de 17 pulgadas combinadas con neumáticos Bridgestone en medida 265/65.

INTERIOR

Con un estilo completamente diferente y más innovador, el habitáculo se muestra moderno y hasta controvertido para algunos. El panel de a bordo posee plásticos oscuros, abundantes líneas redondeadas y una pantalla táctil del tipo «flotante» y con 7 pulgadas que no le gusta a todos.

Aplausos para el tablero, que cuenta con cuatro instrumentos bien legibles (incluyendo temperatura de agua del motor), buena iluminación y una generosa pantalla central a color para el ordenador de a bordo, muy completo y con un «saludo» a través de un guiño de luces de la Hilux (con un dibujo muy real). Además, hasta permite calcular el gasto en pesos del consumo de combustible.

Sin descollar, la calidad general es correcta teniendo en cuenta el segmento, mientras que la posición de manejo ha mejorado notablemente gracias a que se puede modificar la altura de la butaca y el volante, que además sumó la regulación en profundidad, algo limitada. Se consigue una buena postura y todos los comandos quedan cerca del conductor.

Para las plazas traseras, la marca anuncia 3,5 centímetros extra de espacio longitudinal, lo que se traduce en un espacio correcto para las piernas, sin sobresalir en el segmento. Además, tanto el cojín como el respaldo cumplen bien su función y no pasan factura en viajes largos, momentos en lo que también se agradece la presencia de las nuevas salidas de aire del climatizador, en este caso automático y con buen funcionamiento.

Otro gran avance del modelo se dio en la insonorización, la cual le permite a los pasajeros de ambas filas de asientos sin necesidad de alzar demasiado la voz.

EQUIPAMIENTO

A nivel general, la nueva Hilux tiene todo lo necesario, con novedades y algunos faltantes. La lista incluye climatizador automático, control de velocidad crucero, central multimedia con Bluetooth y navegador, levantavidrios eléctricos (4), cierre centralizado de puertas a distancia, doble regulación de volante, modos Eco y Power, tapizado de tela con buena calidad, toma corriente de 220 voltios, volante multifunción revestido con cuero, cámara de estacionamiento trasera y rueda de auxilio homogénea.

Entre las deudas que más se notan figuran ítems que tampoco están presentes en las versiones más completas de la gama: gancho de remolque trasero (algo que debería ser parte de la pick up desde las variantes base), luces de guantera y caja de carga y sensores de estacionamiento delanteros y traseros, los cuales serían muy útiles debido al tamaño del vehículo.

Más detalles, en lista de abajo.

SEGURIDAD

La evolución de la pick up también se dio en el rubro de la seguridad. Todas las versiones cuentan de serie con ABS con distribución electrónica (EBD) y asistencia de emergencia (BA), doble airbag frontal, airbag para rodillas de conductor (inédito en el modelo), luces de frenado de emergencia, controles de estabilidad (VSC) y tracción (TRC), control de balanceo de remolque, cinco apoyacabezas y cinturones inerciales de tres puntos (en las doble cabina) y anclajes Isofix y superiores en respaldo.

La versión SRV también posee luces antiniebla delanteras y traseras, anclajes Isofix para sillas infantiles y alarma antirrobo. Por su precio, merecería algún airbag extra, al menos los laterales delanteros. Cabe recordar que las versiones SRV Pack y SRX tienen bolsas laterales y de cortina (7 en total). El equipamiento de la SRV está bien.

La nueva Hilux cuenta con el plus de haber alcanzado la calificación máxima en las pruebas de choque de Latin NCAP, en las que logró las cinco estrellas tanto para el cuidado de adultos como de niños.

MOTOR Y CAJA

Completamente nuevo, el motor de la Hilux SRV es el 2.8/16v de la familia GD (Global Diesel). Posee cuatro cilindros, inyección directa common rail, turbocompresor de geometría variable e intercooler, a lo que se suma la tranquilidad que aporta la cadena de distribución (su antecesora tenía correa). Entrega 177 caballos (6 extra) cuando gira a 3400 rpm y un torque de 45,9 kgm ó 450 Nm entre las 1600 y 2400 rpm cuando se une con la caja automática (con la manual es de 42,8 kgm ó 420 Nm). El 3.0 anterior tiene 34.3 kgm ó 336 Nm.

El funcionamiento marca una notable evolución -respecto al citado 3.0- en los niveles de sonido y vibraciones, mucho más bajos. Además, tiene un importante incremento de torque, y si bien no se muestra con tanto nervio, empuja decidido desde las 1600 rpm y encuentra su punto máximo en la zona media del cuentavueltas, lo que brinda soltura tanto en la ciudad como en la ruta, y a la hora de encarar terrenos difíciles como la arena o el barro.

En esta versión, la caja que lo acompaña es la nueva automática con seis velocidades (antes había una de cinco), la cual ofrece cambios de marchas rápidos y relaciones que permiten aprovechar la potencia y reducir los consumos de combustible: a 100 km/h hace que el motor gire a sólo 1500 rpm, mientras que a 130 m/h el régimen es de apenas unas 2000 revoluciones. La función Sport (manual) ofrece cambios algo más lentos, aunque no llega a inquietar al conductor. Además, es del tipo secuencial, es decir que no pasa las marchas en forma automática, siempre lo debe hacer el conductor.

Y si hablamos de prestaciones, la combinación mecánica le brinda cifras modestas, con una aceleración de 0 a 100 km/h resuelta en 12,1 segundos y lograr una velocidad máxima de aproximadamente 180 km/h, mientras que el consumo urbano es de unos 11,5 l/100 km, en ruta a 100 km/h de 6,9 y a 130 km/h de 9,5 l/100 km, valores correctos que se complementan con el alto precio del gasoil grado 3, el recomendado por Toyota para su pick up.

Otra de las novedades de la nueva Hilux es un sistema que mediante la electrónica varía la respuesta del acelerador y cuenta con dos modos de manejo: Eco y Power. El primero ofrece una respuesta más tardía para consumir menos combustible; el otro brinda más nervio para lograr una mejor aceleración.

COMPORTAMIENTO DINÁMICO

A este rubro también ha llegada la evolución, ya que a la conocida robustez del modelo, ahora le suma una cuota extra de confort de marcha, algo logrado -en parte- con la suspensión trasera con eje rígido que incluye nuevos elásticos con 1400 mm de longitud (antes con 1300). La nueva configuración se advierte a la hora de circular por la ciudad, donde resuelve mejor el paso por cunetas, lomos y pisos desparejos.

Como dije anteriormente, la robustez es un sello de la Hilux. Y esta nueva generación cuenta con un chasis de largueros con 20 por ciento más de rigidez torsional, una mejora que es bienvenida durante las tareas pesadas y el off road, donde se destaca por su desempeño tanto en barro como arena. Para estos tipos de caminos está el sistema de tracción 4×4 con eje delantero conectable y caja reductora, características que la convierten en una “topadora”. Además, dejó de lado al clásico selector con palanca y recibió al nuevo sistema electrónico con ruedita ubicada en la consola central.

A eso se le suma la novedad que proponen tanto el control de tracción activo, que distribuye el torque según la adherencia de cada neumático, como el bloqueo de diferencial trasero, lo que permite que las ruedas tengan la fuerza necesaria para salir de una situación off road extrema. Además, la electrónica incluye el asistente de arranque y el control de descenso en pendientes.

Si se piensa en el trabajo, esta versión de la Hilux está configurada para cargar 810 kilogramos y ofrecer una capacidad de remolque de 3500 kilos.

Independiente, la suspensión delantera posee una barra estabilizadora más gruesa, lo que contribuye a la eficiencia de un sistema que también muestra un crecimiento a la hora de poner a prueba la dinámica. Va firme en lo derecho a alta velocidad, con buena tenida direccional, mientras que en las curvas acusa inclinaciones de la carrocería moderadas y muestra un comportamiento franco, lo cual brinda seguridad. Asimismo, y ante la presencia de excesos, todas las versiones de la nueva gama cuentan con controles de estabilidad y tracción.

Con sistema hidráulico, la dirección posee una asistencia acertada tanto en el manejo urbano como en lo veloz, aunque no se caracteriza por ser de las más precisas.

Los frenos tienen un funcionamiento correcto, con distancia lógicas. De 100 km/h a cero necesita 42 metros, mientras que de 130 km/h a cero demanda 91 metros.

Por su parte, las luces delanteras ofrecen un funcionamiento adecuado, aunque no llegan al rendimiento de los LED de las versiones más caras.

PRECIO Y GARANTÍA

No es una novedad que todos los autos están caros, y que los precios de las camionetas están entre los más elevados. Toyota comercializa esta versión de la Hilux a 718.800 pesos, mientras que la opción más económica de la gama (cabina simple 2.4 4×2) cotiza a 409.700 pesos, y la más cara (cabina doble SRX 2.8 AT 4×4) a 789.500 pesos.

Por su parte, la garantía es de 3 años ó 100 mil kilómetros, a lo que se le suma la reconocida calidad de posventa que ostenta la marca japonesa.

Los rivales directos: Chevrolet S10, Ford Ranger, Mitsubishi L200, Nissan NP300 Frontier y Volkswagen Amarok.

 

FICHA TÉCNICA

Motor: diésel, transversal, cuatro cilindros en línea, 16 válvulas

Cilindrada: 2755 cc.

Alimentación: inyección directa common rail, turbocompresor e intercooler

Potencia: 177 CV a 3400 rpm

Torque: 45,9 kgm ó 450 Nm entre 1600 y 2400 rpm

Caja: automática con convertidor de par y seis velocidades

Tracción: 4×4 – trasera con eje delantero conectable y caja reductora

Suspensión delantera: independiente con doble brazo y resortes helicoidales

Suspensión trasera: eje rígido con elásticos y amortiguadores

Frenos: discos ventilados delanteros, tambores traseros. ABS con EBD y BA

Dirección: con asistencia hidráulica

Neumáticos: 265/65 x 17″

Estructura: chasis con largueros

Largo/ancho/alto/entre ejes: 5330/1855/1815/3085

Tanque de combustible: 80 litros

Peso: 1145 kilos

Despeje: 227 mm

Peso en orden de marcha: 2070 – 2100 kilos

Peso bruto total: 2910 kilos

EQUIPAMIENTO

ABS con distribución electrónica, asistente de frenada y luces de emergencia

Airbags frontales para conductor y acompañante

Airbag de rodillas para conductor

Controles electrónicos de estabilidad y tracción

Control de tracción activo

Cinturones de seguridad inerciales de tres puntos en todas las plazas

Anclajes Isofix en plazas traseras

Luces antiniebla delanteras y trasera

Bloqueo de diferencial trasero

Llantas de aleación de 17 pulgadas

Computadora de a bordo multifunción

Inmovilizador de motor

Control de balanceo de tráiler

Apoyacabezas en todas las plazas

Alarma perimetral y volumétrica

Lavantavidrios eléctricos en las cuatro puertas (con un toque para conductor)

Espejos cromados con luz intermitente, calefacción y rebatibles eléctricamente

Climatizador automático

Volante con regulación de altura y profundidad

Eco y Power Mode

Salida de 220 voltios

Cámara trasera

Cierre centralizado de puertas a distancia

Tablero con display de información múltiple a color de 4,2”

Control de velocidad crucero

Volante multifunción revestido con cuero

Asistente de descenso en pendiente

PRESTACIONES

Aceleración 0 a 100 km/h: 12,1 segundos

Velocidad máxima oficial: 178 km/h

Frenada 100 km/h-0: 42 metros

Frenada 130 km/h-0: 91,2 metros

Consumo urbano: 11,5 l/100 km

Consumo a 100 km/h: 6,9 l/100 km

Consumo a 130 km/h: 9,5 l/100 km

LO BUENO

*Avances en tecnología y seguridad

*Funcionamiento del motor

*Más confort de marcha

*Fortaleza/capacidad off road

*Trayectoria/postventa

LO MALO

*Pantalla táctil lenta

*Algunos faltantes

*Precio elevado

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Por Gastón Vanini

Periodista especializado en industria automotriz.

3 comentarios en «Prueba: Toyota Hilux 2.8 SRV AT 4×4»

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