Lo evaluamos por primera vez en 2017 y ahora nos subimos a la evolución, con cambios en diseño y mayor seguridad. Manejo deportivo con un excelente comportamiento dinámico.

BARRA NOTAS 3

Texto y fotos: Gastón Vanini.

La evolución Renault Sandero R.S. llegó hace más de un año (lanzamiento) para sumarse al resto de la gama del hatchbak (más detalles). Producida exclusivamente en Brasil, la versión desarrollada por Renault Sport continúa ostentado su condición de deportivo en serio, con cambios estéticos y mejoras en la seguridad en comparación con el RS original que probamos en 2016 (ver).

A diferencia de las otras versiones del modelo, el R.S. mantuvo su diseño general, siempre con un estilo exclusivo. Posee ópticas oscurecidas y con luces halógenas, parrilla con la sigla de la verisón en el centro (junto al rombo) y paragolpes con grandes entradas de aire, aplique gris y luces LED diurnas. Carece de faros antiniebla.

Los cambios se extienden a los laterales, donde luce las nuevas y atractivas llantas de aleación diamantadas (con dos colores) y 17 pulgadas que se combinan con las pinzas rojas para los frenos (con discos en las cuatro ruedas) y los neumáticos 205/45, además de los faldones sobre los zócalos y el nuevo aplique con la presencia de Renault Sport y los colores de la bandera francesa.

Como las otras variantes de la gama, la zona trasera recibió nuevas ópticas dobles, ahora con una pieza que invade el portón y luces LED. Aportan modernidad y se combinan con el nuevo alerón de color negro brillante, mientras que el paragolpes mantuvo el estilo de difusor y está acompañado por la doble salida de escape cromada.

La atractiva configuración exterior, ahora con cambios que mejoraron aún más la propuesta, anticipa el funcionamiento del Sandero R.S., un deportivo de verdad.

El panel de a bordo se combina con los nuevos tapizados de tela con una banda roja destinados a las excelente butacas delanteras, que “abrazan” y brindan una muy buena sujeción lateral, además de regular su altura.

La calidad general es adecuada para el segmento, mientras que la posición de manejo no es la ideal debido a la ausencia de la regulación de profundidad del volante, que sólo ajusta su altura y tiene un diseño exclusivo con cuero, costuras rojas y excelente tacto.

También posee un tablero con pantalla algo pequeña, pero con nuevo marcador de tempatura y apliques rojos que se extienden a las salidas de aire, techo negro, pedalera deportiva de aluminio perforado y selector de caja también con cuero y costuras rojas.

Pese al condicionamiento por la presencia de las butacas delanteras deportivas, las plazas traseras ofrecen un adecuado espacio para las piernas y la cabeza, mientras que el asiento posee superficies planas que mejoran la posición de los tres pasajeros.

La ganancia del sector fue para la seguridad; ahora posee apoyacabezas y cinturón de seguridad inercial para la quinta plaza y anclajes Isofix para sillas infantiles.

Por su parte, la insonorización del habitáculo debería ser mejor, mientras que el baúl es de los más grandes del segmento B gracias a sus 320 litros, aunque carece de asiento rebatible por tercios. Bajo el piso está la rueda de auxilio temporal, con llanta de acero de 15 pulgadas, neumático 185/65 y la recomendación de circular hasta 80 km/h. No es lo ideal.

Ubicado en lo más alto de la gama del Sandero, el R.S. incluye levantavidrios con sistema de un toque en las cuatro puertas, climatizador automático (con comandos muy prácticos), limitador y regulador de velocidad, computadora de a bordo, indicador de cambio de marcha, cierre centralizado de puertas y automático en rodaje, apertura interna de tanque y sistema multimedia Media Evolution con Android Auto, Apple CarPlay, pantalla táctil de 7 pulgadas y el práctico comando satelital detrás del volante.

También cuenta con un sistema con tres modos de conducción a través de la tecla “RS” ubicada en la consola central.

Más detalles, en la ficha de abajo.

El R.S. anterior ya contaba con controles de estabilidad, de tracción y de arranque en pendiente, sistemas que ahora están complementados por los nuevos airbags laterales delanteros que protegen el tórax y la cabeza.

En el rubro además contiene sensor de estacionamiento trasero y alarma antirrobo perimétrica.

Las pruebas realizadas por Latin NCAP definieron una calificación de tres estrellas (de un total de cinco) para el ocupante adulto y de cuatro estrellas para el ocupante niño, mientras que la estructura del habitáculo fue considerada inestable.

Mantuvo el conocido motor naftero F4R con cuatro cilindros y 16 válvulas compartido con Duster y Duster Oroch, aunque con una calibración exclusiva y otras mejoras. Además, incluye una tapa que se puede quitar para lograr una mayor entrada de aire en la admisión. Entrega 145 caballos de potencia a 5.750 rpm y 198 Nm (20,2 kgm) de torque a 4.000 rpm.

Como siempre, la caja es manual con seis velocidades con relaciones muy cortas asociada con la tracción delantera.

Por su parte, la dirección es electrohidráulica, los frenos tienen discos en las cuatro ruedas (una exclusividad en la gama Sandero) y las suspensiones cuentan con esquema delantero independiente y trasero semi independiente, junto con una calibración específica para el R.S.

De larga trayectoria en la región, el motor es progresivo y se destaca por entregar reacciones ágiles desde bajas revoluciones, comportamiento también logrado gracias a las relaciones cortas de la caja, que ofrece un selector con accionamiento blando. El conjunto permite el rápido ascenso de la aguja del cuentavueltas, que cuando llega a unas 7.000 rpm avisa a través de un sonido; ideal para la conducción en circuito.

Las sensaciones agradables durante el manejo se trasladan a las prestaciones, con una aceleración de 0 a 100 km/h resuelta en 8,7 segundos y de 0 a 400 metros en 16,5 segundos, mientras que los 1.000 metros los cubrió en 30,6 s y pasó de 80 a 120 km/h en quinta marcha en 7,8 segundos. Además, Renault anuncia una velocidad máxima de 200 km/h.

Los consumos, por su parte, incluyen un gasto de 11,5 litros cada 100 kilómetros en la ciudad, de 6,3 l en ruta a 100 km/h (el motor trabaja a aproximadamente 3.000 rpm, un régimen alto por la relación de caja) y 8,5 l a 130 km/h (unas 3.800 rpm), cifras moderadas para su propuesta deportiva.

Con una asistencia que la hace pesada, la dirección es muy precisa e ideal para el manejo deportivo, mientras que las suspensiones sobresalen por ofrecer un comportamiento dinámico excepcional en cualquier condición; se disfruta especialmente en las curvas, donde muestra gran eficacia con el plus de generar adrenalina; ideal para circuito. Y en la ciudad brinda un andar rígido lógico por el planteo de la suspensión y el perfil bajo de los neumáticos.

El escape es exclusivo y se destaca por su cautivante sonido ronco, que no molesta en la utilización diaria y puede ser modificado con su sistema electrónico y a través del modo de conducción Sport, mientras que la función Sport + desconecta completamente el control de estabilidad, lo que brinda la posibilidad de realizar un manejo aún más deportivo.

Si nos referimos a los frenos, los cuatro discos junto con el ABS logran detener los 1.190 kilogramos cuando circula a 100 km/h en 39,9 metros, una buena distancia.

Otro de los atractivos del Renault Sandero R.S. es el precio de lista de 2.071.500 pesos, que se combina con la garantía de 3 años o 100.000 kilómetros. El modelo más cercano en el segmento es el Volkswagen Polo GTS ($ 3.501.850), aunque con una cofiguración mecánica diferente.

Descargar, acá

Aceleración 0 a 100 km/h: 8,7 segundos

Aceleración 0 a 1000 metros: 30,6 segundos

Velocidad máxima oficial: 200 km/h

Recuperación 80-120 km/h: 7,8 segundos

Frenada 100 km/h-0: 39,9 metros

Consumo urbano: 6,3 l/100 km

Consumo a 100 km/h: 8,5 l/100 km

Consumo a 130 km/h: 11,4 l/100 km

Atractiva configuración exterior para el Sandero R.S. Incluye un diseño frontal exclusivo. 

Espejos negros con luz intermintente integrada.

Las nuevas llantas de aleación de 17″ se lucen junto con las pinzas de frenos rojas y los neumáticos con perfil bajo.

Renault Sport está presente en los laterales.

El color negro brillante ahora también se extiende al alerón trasero. 

También está en la zona trasera, donde el R.S. recibió nuevas ópticas con luces LED.

La doble salida de escape es otra de las características exclusivas.

Las puertas ganaron un aplique con diseño de fibra de cabono. Los cuatro levantavidrios ahora están juntos.

El panel de a bordo conocido se combina con la presencia del color rojo en salidas de aire y otras piezas.

Volante deportivo con excelente tacto. Regula sólo su altura.

El práctico comando satelital de Renault.

La pedalera deportiva de aluminio es otro de los sellos del Sandero más potente. 

Alfombra con la sigla de la versión y comando para abrir el tanque de combustible. 

El tablero también es exclusivo. Sumó el medidor de la temperatura del motor. 

El modo Sport sumá caracter deportivo. 

La pantalla de 7″ es rápida. El sistema perdió el navegador satelital, pero ganó conexiones con el teléfono.

Práctico climatizador automático y zona de teclas, incluida la del regulador y limitador de velocidad. 

La tecla RS cambia el carácter del hatchback.

Excelentes butacas que se destacan por su sujeción lateral.

El sector trasero es cómodo. Sumó el apoyacabezas y el cinturón inercial para la quinta plaza.

Con 320 litros, el baúl es uno de los más grandes del segmento.

Mejorable, la rueda de auxilio es temporal.

Motor. Progresivo y con buena entrega.

El Sandero R.S. es una interesante propuesta de Renault para la región. 

Ahora con una evolución que lo hace aún más atractivo. BARRA NOTAS 3

Por Gastón Vanini

Periodista especializado en industria automotriz.

2 comentarios en «Prueba: Renault Sandero R.S.»

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *