Manejamos la versión con equipamiento “full” y caja manual del aventurero del segmento B que la marca del rombo produce en Argentina.
Texto y fotos: Gastón Vanini.
El Renault Stepway, el “aventurero” del segmento B basado en el Sandero y producido en la Fábrica Santa Isabel de Córdoba, fue renovado con el resto de la familia (incluido el Logan) en 2019 a través de cambios en el diseño, el equipamiento y la mecánica.
Luego de probar el Sandero RS (leer) y el Logan Instens CVT (leer), manejamos la versión Instens con caja manual del Stepway.
El hatchback con estilo de crossover se destaca por combinar el acertado rediseño exterior, que incluye luces LED diurnas delanteras y luces LED traseras, con una configuración que contiene paragolpes con plásticos con apliques de color gris satinado y otros negros que se extienden a los guardabarros y los zócalos.
También se destacan las barras de techo -combinan el gris satinado con el negro- y el generoso despeje del suelo ideal para las calles y los caminos del país. Tampoco faltan los cromados, los espejos y manijas con el color de la carrocería y las llantas de aleación oscuras de 16 pulgadas, acompañadas por neumáticos para ruta con medida 205/55, un perfil algo bajo.
En el habitáculo cuenta con un diseño agradable junto con plásticos rígidos y una calidad general adecuada para el segmento. Además, sobresalen los apliques de color negro brillante y otros similares al metal incluidos en el volante, con comandos y excelente tacto. A eso se suma el tablero con dos agujas y un display pequeño y monocromático.
Logré una correcta posición de manejo que sería mejor con la regulación de profundidad del volante (sólo se puede ajustar la altura, como la butaca). Y las plazas traseras tienen buen espacio para las piernas y la cabeza, además de un asiento que permite viajar cómodamente incluso en la tercera plaza.
La insonorización debería mejorar, mientras que el baúl se destaca por ser uno de los más grandes del segmento con 320 litros, volumen que además se puede ampliar con el asiento trasero rebatible por tercios. Por su parte, la rueda de auxilio es temporal y permite circular a velocidades de hasta 80 km/h.
Esta versión “full” (la otra es la Zen) tiene todo lo necesario: climatizador automático (se destaca el diseño y la calidad de los comandos), tapizado de cuero ecológico con diseño exclusivo, espejos eléctricos, volante y selector de caja con cuero, control y limitador de velocidad, computadora de a bordo, levantavidrios eléctricos con un toque en las cuatro puertas, comando satelital en la columna de dirección (muy práctico) y sistema Media Evolution con una rápida pantalla táctil de 7 pulgadas, Eco Coaching y conexiones con Android Auto y Apple Car Play.
En seguridad tiene frenos con ABS y asistencia de frenado de urgencia, controles de estabilidad y de tracción, airbags frontales y laterales de tórax y cabeza para las plazas delanteras, asistencia de arranque en pendiente, cinturones de seguridad inerciales con limitador de esfuerzo (en todas las plazas) y pirotécnico para el conductor, anclajes Isofix, luces antiniebla delanteras y trasera, cámara y sensores de estacionamiento traseros y alarma perimétrica. Le reclamamos la presencia de las bolsas de aire de cortina (también cubren las plazas traseras). Sin embargo, el Stepway nacional posee más airbags que el Duster, con sólo dos bolsas.
Junto con el mayor equipamiento, el modelo del rombo recibió refuerzos estructurales. ¿El resultado? Luego de las pruebas de choque de Latin NCAP realizadas en diciembre de 2019, recibió una calificación de tres estrellas para adultos y cuatro estrellas para niños (la nota máxima son las cinco estrellas). Además, mostró una estructura del habitáculo inestable.
Desde 2019, los Logan, Sandero y Stepway utilizan el motor naftero 1.6 de origen Nissan con 16 válvulas y cadena de distribución. Está ubicado debajo de un capó con amortiguador (una rareza que es bienvenida), posee cadena de distribución y genera 115 caballos de potencia a 5.500 rpm y 154 Nm de torque cuando funciona a 4.000 rpm. En la unidad de pruebas se combina con una caja manual con cinco marchas (también hay una versión con la automática CVT X-Tronic). La tracción es delantera.
También tiene dirección con asistencia electrohidráulica, suspensión delantera independiente y trasera semiindependiente y frenos con discos delanteros y tambores traseros.
El motor ofrece un buen funcionamiento y una adecuada entrega de fuerza desde bajas revoluciones que permite una conducción ágil en la ciudad, donde además se destaca el trabajo del selector gracias a su diseño y a los pasajes de cambios cortos y precisos.
En la ruta se defiende para la utilización familiar con prestaciones esperables para su potencia y torque. Acelera de 0 a 100 km/h en 12,4 segundos y de 80 a 120 km/h en cuarta marcha en 11,1 segundos.
El conjunto ofrece un consumo de 10,6 litros cada 100 kilómetros en la ciudad, de 6,5 l a 100 km/h y de 8,4 l a 130 km/h.
Con suspensiones convencionales, el Stepway cuenta con una marcada robustez que permite transitar con confianza por calles con cunetas y lomos y en caminos en mal estado, donde además se destaca el despeje y brinda un adecuado confort de marcha. Sin embargo, en algunas superficies se muestra algo firme.
Durante el manejo veloz muestra marcadas inclinaciones en las curvas debido a la altura del vehículo, que tiene control de estabilidad para corregir excesos. La dirección es algo pesada y los frenos lo detuvieron de 100 km/h a cero en 40,5 metros, una buena distancia para su propuesta.
El Renault Stepway Intens probado cuesta 3.836.500 pesos. La gama también tiene las versiones Zen (3.531.300), C.A.B. (3.906.000) e Intens CVT (4.042.800). La garantía, por su parte, cubre 3 años o 100.000 kilómetros.
Descargar, acá.
Aceleración 0 a 100 km/h: 12,4 segundos
Recuperación 80-120 km/h: 11,1 segundos
Frenada 100 km/h-0: 40,5 metros
Consumo urbano: 10,6 l/100 km
Consumo a 100 km/h: 6,5 l/100 km
Consumo a 130 km/h: 8,4 l/100 km